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miércoles, 14 de julio de 2010

Angels. Capítulo 7

Angels.
Capítulo 7.
Resurgido.

Kat miró a su alrededor. No tenía escapatoria, estaba totalmente rodeada por los puñeteros caballeros negros que adoptaban una forma similar a la de la Emperatriz de los Lobos.

"Fenómeno Kat, le dices a tu hermano que se vaya que te las puedes arreglar sola y en realidad no puedes. Eres la caña, chica"pensó la morena.

Pero no podía rendirse, no, antes se moría.

Uno de sus grandes defectos era su orgullo que no le permitía nunca darse por vencida.

Quizá devería hacer una excepción.

Pero no. La ojisverdes sacudió su cabeza lobuna apartando esos pensamientos. "Si tengo que morir, moriré. No me pienso entregar a estos imbéciles que me van a llevar a junto sus jefecillas para que digan que me maten. Además, ¿qué pensaría Saga de mi?No, no y no. Siempre luché por ser modelo cuando me decían que yo no valía para eso y ahora soy una de las mejores modelos del mundo aunque estea mal que yo lo diga. Si lo conseguí una vez, lo puedo conseguir ahora. Y si no lo consigo por lo menos moriré con orgullo",pensó.

Los caballeros negros la rodeaban cada vez en un círculo más cerrado. Uno de ellos hizo una señal con la cabeza y saltaron todos encima de ella. Kat fue rápida y los esquivó, saliendo de la encerrona con un gran salto de licántropa.

Los muy estúpidos se pusieron a pelear entre ellos pensando que ella estaba ahÍ, atrapada e indefensa.

Kat echó a correr pero uno de los caballeros negros en forma lobuna se dio cuenta de su error y con un gruñido saltó hacia ella.

Esta vez la chica no pudo evitar el golpe y cayó de costado rodando por el claro. Se irguió y le gruñó, pero un fuerte dolor en las costillas hizo que sus patas flaquearan. Con un ladrido de dolor cayó otra vez al suelo.

El caballero se recipitó hacia ella y le mordió en el cuello.

Katrina se revolvió intentando soltarse, pero no fue capaz.

El caballero estaba a punto de desgarrarle el cuello cuando una zarpa le dió en todo el hocico.

La sangre comenzó a fluir y aullando del dolor, el caballero negro en forma lobuna se apartó.

Kat estaba a punto de escapar corriendo al ver el resultado de su zarpazo cuando para su horror los demás caballeros negros-lobunos que estaban peleando imbécilmente unos con otros se dieron cuenta de que no le estaba dando a ella, si no a sus compañeros.

"Oh, oh. Mierda. Estoi perdida." pensó la chica.

De pronto olló un:¡Galaxian esplosion!

"¡Saga! Quizá si consigo llegar hasta él me pueda salvar"pensó la chica.

Kat corrió todo lo que sus patas le permitían hasta llegar a junto Saga.

El caballero de oro de Géminis ya se marchaba después de matar a aquellos caballeros negros con piel de lobo cuando olló un ladrido a sus espaldas.

-¿No os ha llegado aún, caballeros de pacoti...

Saga calló al ver quien era.

Kat en forma lobuna. Tenía una herida en el costado derecho que no paraba de sangrar, pero parecía que ella no se había dado cuenta aún.

Katrina corrió hacia él. Cuando llegó a su lado, las patas le fallaron definitivamente.

"Pero, ¿qué me pasa? Es como si me quedara sin fuerzas."pensó ella. Definitivamente no se había dado cuenta de la herida.

Saga se agachó y la cogió en brazos.

-¿No puedes caminar?-preguntó él muy preocupado. Kat le resondió con un ladrido.-Asi no te entiendo.-volvió a decir con una pequeña sonrisa.

Katrina adoptó su forma humana en brazos de él.

-Perdona. No. No se que me pasa es como si perdiera las fuerzas.-respondió ella mirándolo directamente a los ojos.

Realmente le gustaba. Era la primera vez que Kat conocía a un hombre como él. Guapísimo, cuerpo impresionante, ojos profundos, simpático, comprensivo... Pero aquella vez, cuando le vio a los ojos, sintió ganas de abrazarlo y besarlo para que dejase de preocuparse. Ya que Saga tenía pintada la más pura preocupación en sus ojos azules. De repente, Saga se quedó mirando el costado derecho de Katrina.

-¿Qué es lo qué pas...-empezó ella pero calló al ver que no paraba de sangrar.

Saga puso la mano en la herida. Casi automáticamente, Katrina dejó de sangrar y la herida se curó.

Sobraron las palabras. Con una mirada Saga y Kat se lo dijeron todo.

Saga la dejó en el suelo ahora que podía caminar. Al bajarla, sin querer, sus manos se quedaron en la espalda de ella. sonrojado, las apartó. Pero Katrina lo interceptó y las volvió a dejar en su espalda, de forma ue él la estaba abrazando por la cadera.

Kat sonrió.

Saga la cogió suavamente por las muñecas y dejó las manos de ella en sus hombros. La atrajo hacia si mismo y la besó. Sintió como las manos de Katrina se entrelazaban alrededor de su cuello y como sus labios encajaban a la perfección.

Parecían hechos el uno para el otro.

Un gruñido a sus espaldas les separó.

Se giraron los dos, eran los caballeros negros a los que Kat había dado esquinazo.

Katrina iba a transformarse para luchar ahora que ya podía cuando Saga extendió su brazo izquierdo y la paró. Con un suave empujó, el caballero la puso detrás suya.

-¡Genma Ken!-atacó el caballero de Géminis.

Los caballeros cayeron muertos como si fueran hojas de papel.

El caballero negro que más alejado estaba del resto desapareció bajo tierra.

Saga y Kat intercambiaron una mirada extrañada y corrieron a ver que había pasado.

En el lugar donde había estado el cuerpo del caballero negro había un agujero. Parecía un túnel.

Kat se agachó y apartó las hojas.

En efecto, era un túnel.

El caballero de Géminis sintió que algo tiraba de él. Algo atraía su cosmos fuertemente, y sin darse cuenta se tiró al túnel.

-¡Saga!-gritó la chica.

Katrina hizo un vano intento de agarrarlo por el brazo, pero era demasiado tarde. Saga ya se había caído por aquel túnel tan extraño.

La chica cerró los ojos y concentró todos sus sentidos en aquel misterioso túnel.

Y de repente, la sintió y el odio comenzó a resurgir.

Un odio que creía apagado hace mucho tiempo.

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